Medio planeta (y el planeta jugón entero) viendo la conferencia de Nintendo el pasado martes,dando por hecho que la compañía nipona había dado por fin el salto a la alta definición, entusiasmados ante las imágenes que nos estaban sirviendo en bandeja... y resulta que todo eran materiales robados de títulos corriendo bajo una PS3, una 360 o un PC.
Lo dijo el mismísimo Reggie Fils-Aime, responsable de la compañía en norteamérica, unas horas después de haber desvelado la sucesora de Wii, para después tranquilizar a los seguidores de la gran N, "en Wii U esos títulos se verán igual de bien [que en las consolas de la competencia]".
La excusa que dio Fils-Aime para justificar el uso de imágenes de consolas de terceros es que a un año vista de la salida a la venta de la máquina, los desarrolladores no han tenido tiempo para trabajar sobre la nueva consola.
Y por mucho que se empeñe en poner excusas, lo cierto es que tenemos ya muchos E3 a nuestras espaldas como para no recordar presentaciones de hardware de compañías que mostraron, a más de un año de lanzamiento, títulos en progreso de juegos que se estaban desarrollando para sus máquinas.
Pero el gran miedo de Nintendo -defraudar al público hardcore- pudo con la transparencia pura y dura. Y para salir del paso de la mejor manera posible, qué mejor que hacer un arreglillo por si la cosa colaba. En todo caso, meteduras de pata aparte, Fils-Aime asegura, y en este blog lo hemos contado, que Wii U moverá gráficos a 1080p. Esperemos que para el año que viene ya podamos ver imágenes reales de lo que es capaz de hacer la sucesora de Wii.Adios!
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